Blogs LaFamilia.info – 16.10.2015
Hablemos del amor matrimonial que conjuga el amor de amistad, el amor complementario, el amor de pasión, el amor sobrenatural, el amor en lo pequeño, lo grande y lo valioso.
También conjuga el amor al interés, al perdón, al dolor, a la lucha y al sacrificio, al remedio, a la fidelidad, al compromiso, al silencio, a la alegría, y a tantas cosas más…
Permiso , Perdón y Gracias
El papa Francisco nos ha regalado una receta para conservar el amor conyugal. La entregó el día de San Valentín, 14 de febrero de 2014, en la Plaza de San Pedro al dirigirse a miles de jóvenes próximos a contraer matrimonio. Contiene esta receta tres ingredientes, aparentemente sencillos y fáciles de cumplir pero hay que poseer entereza y más de una cualidad para vivirlos a plenitud. Son esenciales para una convivencia feliz en el matrimonio: PERMISO, GRACIAS Y PERDÓN.
En la sabiduría popular estos tres ingredientes son explícitos en la boca de mi amiga María del Carmen de quien, como artista que es, algunos amigos consideran que algunos de sus puntos de vista son un tanto excéntricos. Puede ser, pero en materia de amor conyugal me parecen muy aterrizados y llenos de contenido.
¿Alabar al marido?
Con mucha gracia, se encuentra siempre pronta a compartir consejos útiles que toda esposa debe tener presente en el cuidado de su vida matrimonial. Aconseja que delante de las amigas u otras mujeres, no es conveniente estar alabando al marido, o por lo menos no hablar ni bien, ni mal de él. Aunque se puede dejar escapar uno que otro defecto… que lo haga ver algo incómodo para convivir… y continúa, “Si les cuento lo feliz que me hace, uno nunca sabe a quien le pueda interesar comprobarlo.” Agrega que esto es también válido tanto para los maridos como para las empleadas del hogar. ¡Con esto puedes evitar que te dejen sin marido o sin empleada!
¡Qué rico es llegar a casa!
En otra ocasión le oí decir: “Hay que despedirlo en las mañanas con muchos piropos: «Vas hecho un príncipe, estás buen mozo, te ves regio, ¡te quiero montones!” Nunca, nunca pelear cuando sale, pues llega fastidiado a la oficina donde encuentra de inmediato una atención amable -¿Un tintico doctor? -de quien se ocupa de su agenda, de su correspondencia, y quien sabe quitarle de encima uno que otro lagarto que viene a traer problemas. Pero tampoco hay que esperarlo con una cara larga de fastidio o con quejas del día por los hijos, los contratiempos de la casa, porque entonces no va a querer llegar. Hay que tener en cuenta que hay que propiciar porque tu marido sienta siempre la ilusión y ganas de llegar a casa; que pueda decir: “ ¡Qué rico es estar aquí!
El momento ideal
Pero entonces muchos se preguntarán : “Hay cosas que me tienen enfadada y que debo dilucidar, ¿Qué hago?” Consultemos a María del Carmen. Ella con picardía dice que le ha dado resultado esperar hasta el sábado en la tarde. Entonces ventila la semana y arregla todo lo que quedó de la discusión en la noche…
Hay mucho más en el tintero, así tendremos la oportunidad de continuar con el tema.
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Prince Martínez
Tulia Martínez de Barrios, más conocida como “La Prince” es Orientadora Familiar de la Universidad de la Sabana y Universidad de Navarra (España). Fundadora de los colegios de la Asociación para la Enseñanza, Aspaen en Cartagena, Colombia. Asesora y consultora en temas de dirección, administración y gestión de la educación.