La oración es el encuentro personal con Dios y qué mejor momento que la mañana tener ese espacio de intimidad con el Señor para ofrecer el día y ponerlo en sus manos.
He aquí 10 razones por las que orar todos los días por la mañana.
1. Recuerda que te levantaste porque el Señor sustentó tus sueños
El agradecimiento es el primer rasgo del encuentro personal de cada mañana.
2. Debes apreciar al Dios que levantó
Démosle gracias a Dios porque Él ve los hoyos en nuestra vida que nosotros no vemos.
3. Te despertaste sano y fuerte
Tienes fe y esperanza, además a Cristo que intercede por ti y al Espíritu Santo que te conduce por la vida.
4. ¿Por qué oras en este día?
Una respuesta rápida y certera: porque no sabemos lo que nos espera en este día. El mismo Jesucristo nos previene contra el agobio de la vida y nos anima a entregar nuestra confianza en el Señor: “Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal” (Mateo 6, 34).
Dejemos que Dios enderece nuestros caminos, porque esto se convierte en medicina para nuestro cuerpo. Por eso nada mejor a primera hora de la mañana que invitar a Dios a nuestra vida: “Fíate de Dios de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia…” (Proverbios 3, 5-8).
5. Necesitas a Dios para atacar este día y salir victorioso
Todos necesitamos a Dios para vencer el afán de este día. Tú y Dios son mayoría, no se necesita a nadie más en esta tierra para completar esta unión: Dios tiene la salud para tu enfermedad, la compañía para tu soledad y la solución para tu problema.
6. Debes orar para cancelar las obras de Satanás
Satanás no es omnipresente ni omnipotente, pero tiene miles de demonios que te han estudiado perfectamente a ti y están encargados en destruirte. Por estas cosas necesitas a el Espíritu Santo. Y el diablo se asusta cuando te ve de rodillas, y más si es ante el Santísimo. Por eso, con el salmo 31, 14, puedes proclamar por la mañana: “Mas yo en ti confío, oh Dios; digo: Tú eres mi Dios”.
7. Debes pedir provisión para nuestras necesidades
La oración por la mañana es el momento perfecto para pedirle a Dios lo que necesitas. Por eso, un Padre Nuestro te recodará siempre que todo proviene de la mano misericordiosa y generosa de Dios: “Danos hoy nuestro pan de cada día”.
8. Debes interceder a favor de nuestra familia y amigos
Pedid y se os dará, por eso necesitamos orar por aquellos familiares o amistades que necesitan un encuentro con Dios. Acercar a los demás a Cristo, es el mayor de los regalos y dones que podemos hacer.
Y aunque resulte extraño, es muy importante orar por nuestros enemigos… Recuerda: esta batalla no es tuya sino de Dios.
9. Debes orar por la mañana para experimentar gozo
Tras la oscuridad y el desasosiego de las tinieblas, siempre hay alegría en la mañana. Cuando inicias el día orando recibes gozo, paz, alegría. Por eso, unos pocos minutos con tu Padre Celestial vale mucho más que cualquier otra cosa.
Dice el salmo 30, 5, “porque un momento será su ira, pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, y a la mañana vendrá la alegría”.
10. Debes orar por la mañana para ser parte del plan de Jesús para ti y para los demás
Y un ejemplo claro de ello fue la Santísima Virgen María: “Respondiendo el ángel, le dijo: el Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios” (Lucas 1, 35). La vocación de María para ser parte indispensable del plan salvífico de Dios nos hace ver que también Dios nos quiere protagonistas de nuestra propia existencia para ser portadores de su Palabra a todos los hombres: en el trabajo, en la universidad, en la familia, con los amigos… todos estamos llamados a ser luz de Cristo para todos los demás.
*Publicado originalmente en ReL