Por María Ximena Rondón y Abel Camasca – ACI Prensa
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El P. Ángel Espinosa de los Monteros, conocido sacerdote mexicano experto en temas de familia, hizo una importante reflexión a partir de esta pregunta: ¿Cuál es el secreto para un buen matrimonio?
En entrevista concedida a ACI Prensa, el sacerdote dio estas 5 claves para que el matrimonio dure para siempre:
1. Tener un excelente noviazgo
Cuando el P. Ángel Espinosa sugiere tener un excelente noviazgo subraya la necesidad de conocer bien al otro durante ese periodo: “Se tiene que haber sido muy honesto, presentarse como eres no como quisieras ser o como pretendes, como lo que no eres. Tienes que ser tú mismo”. Así “encontrarás a las persona adecuada”.
2. Tener en cuenta que el matrimonio es para siempre
“Desde que te casas debes saber que no hay vuelta atrás porque es un compromiso para toda la vida”. El P. Espinosa resaltó que es importante ser consciente de esto, de lo contrario, no se case ni diga “te voy a amar para siempre”. También alertó que las rupturas en el matrimonio son las que “dejan a los hijos sin los papás”.
3. Cuidar al otro
Después del matrimonio, el sacerdote señaló que se debe “cuidar” la relación marital. El matrimonio es como una casa propia y esta “se cuida. No estás en una casa de renta donde el día que quieres te vas y por lo tanto no la arreglas, ya que no invertirá dinero en algo que no es tuyo”. “Uno debe decir esta es mi casa, este es mi hogar, estos son mis hijos, es la persona que me ama, esto es para siempre y por tanto le invierto, la arreglo y la cuido”.
Algunos de los “cuidados” del matrimonio que recomienda el sacerdote es tratar al cónyuge con “la mayor bondad”, darle prioridad sobre los hijos, tener salidas frecuentes en pareja y saber perdonar.
4. Saber perdonar siempre
El P. Espinoza dijo que el perdón es un proceso. Hay personas a las que les cuesta más perdonar. Incluso depende de quién las ofendió y la gravedad. “Lo que más duele es que además de la ofensa grave, no se pida perdón. Haces como si no hubiera pasado nada, lejos de llegar a sanar mi corazón se va endureciendo más, entristeciendo más hasta que llega un momento en que digo ‘este ni siquiera le dolió lo que me hizo’”, expresó.
“A una persona que está cerca de Dios y de su gracia, le es mucho más fácil perdonar. Pero siempre yo digo, porque puede que me esté escuchando gente que no está cerca de Dios, el perdón es un proceso. Perdona inmediatamente, pero no esperes sanar inmediatamente”, señaló.
El presbítero manifestó que “cuando se pide perdón sinceramente y se asegura que no volverá a pasar, ya es una ayuda grande”.
5. Dar una buena formación a los hijos
El P. Espinoza comentó que los padres se confunden y creen que formar a un hijo es solo cuestión de enseñarle cosas de etiqueta social. Si bien, esa es una parte, la formación finalmente consiste en formar integralmente a la persona: su inteligencia, consciencia, espiritualidad, voluntad, corazón y carácter.
“Un día le vas a entregar tu hijo o tu hija a una persona ¿Qué le estás entregando? A una persona que sabe controlarse o una persona que va a insultar pegar, amenazar, etc.”, cuestionó. El sacerdote añadió que en la formación de los hijos es importante que los padres los acompañen para poder enseñarles bien los valores familiares.