Sevilla tiene cierta magia que hace que pasear por sus calles se sienta como un sueño. Es que mientras deambulamos por ella, seremos abordados por el eco de las guitarras a la lejanía, el aroma a azahar en primavera e iluminados por la cálida luz del sol sobre monumentos que narran siglos de historia.
Sin embargo, para aprovechar al máximo la escapada por esta tierra y hacer que nuestra visita sea verdaderamente inolvidable, algo que no podemos dejar de lado es la elección del alojamiento. Después de todo, será el refugio donde comienzan y terminan los días de exploración y donde recargaremos energía para disfrutar de nuestro viaje.
Indiscutiblemente, la oferta de hoteles en Sevilla es bastante amplia, y es por ello que encontrar uno que combine una ubicación privilegiada con un confort excepcional y una personalidad propia puede parecer un desafío. Pero, por suerte, algunas opciones no serán únicamente un lugar para descansar, pues son joyas culturales que nos harán sumergirnos completamente en la cultura de la capital andaluza.
Sercotel Las Casas de la Judería
Dormir en este hotel es vivir dentro de la historia de Sevilla. Y a diferencia de lo que estás acostumbrado, no es un edificio único, es un miniuniverso compuesto por 27 casas sevillanas conectadas por pasadizos, patios y jardines.
Aquí cada rincón parece sacado de un cuento; cruzar sus túneles subterráneos o relajarse en su piscina de la azotea con vistas a la Giralda es una experiencia en sí misma. Y eso sin mencionar cómo sus habitaciones, decoradas con muebles de época, nos harán transportarnos casi a otro mundo.
Pero además, la ubicación del hotel es inmejorable, ya que se encuentra en el pleno corazón del Barrio de Santa Cruz, por lo que estaremos a pocos pasos de la Catedral de Sevilla, el Real Alcázar y el Archivo de Indias.
Sercotel Ribera de Triana
Si, por el contrario, te inclinas más hacia lo moderno, pero no quieres perderte las vistas más espectaculares de la zona, el Sercotel Ribera de Triana, que se yergue a orillas del río Guadalquivir, ofrece una panorámica impresionante de la ciudad, especialmente desde su piscina en la azotea.
Para la mayoría, este será el alojamiento perfecto para relajarse tras un día de turismo gracias a que cuenta con un completo centro de spa y bienestar, que nos ayudará a desconectar del bullicio.
La ubicación, por su parte, nos permitirá disfrutar de la Sevilla más auténtica, ya que estaremos a un corto paseo del Puente de Triana y del Mercado de Triana, donde podrás saborear la gastronomía local.
Hotel Bécquer
Si tu prioridad es explorar Sevilla, este establecimiento clásico te permitirá hacerlo de la mejor manera. El hotel rinde homenaje al poeta Gustavo Adolfo Bécquer y ofrece una atmósfera de refinamiento y tranquilidad como ninguna otra.
También cuenta con una piscina en su azotea, por lo que las vistas no serán un problema. Podremos disfrutar directamente de la Giralda, lo que dejará algunas imágenes en nuestra cabeza que durarán para toda la vida.
Sin duda, es un oasis urbano perfecto para los días más calurosos y es ideal para los amantes de las compras y la cultura, pues se encuentra a un paso de la Plaza Nueva y de las famosas calles comerciales como Sierpes y Tetuán.
Cualquier punto de interés del centro histórico está a solo un agradable paseo de distancia. El Hotel Bécquer es perfecto para quienes desean tener toda la vida de Sevilla a unos pasos de distancia.