Investigadores japoneses advierten que la clásica tasa de reemplazo de 2.1 hijos por mujer ya no es suficiente para sostener la población a largo plazo. Según sus modelos matemáticos, las fluctuaciones en natalidad y mortalidad pueden llevar a la desaparición de linajes familiares completos.
Un reciente estudio ha revelado que las poblaciones humanas podrían necesitar una tasa de fertilidad de al menos 2.7 hijos por mujer —mucho más alta que la tradicionalmente aceptada de 2.1— para evitar de manera confiable la extinción a largo plazo.
La investigación, publicada el 30 de abril en la revista PLOS One y liderada por Takuya Okabe de la Universidad de Shizuoka en Japón, pone en entredicho décadas de suposiciones demográficas, según informó Phys.org. A través de modelos matemáticos, el equipo analizó cómo las variaciones en la fertilidad, la mortalidad y la posibilidad de que algunos adultos no se reproduzcan pueden aumentar considerablemente el riesgo de declive poblacional, incluso en sociedades que alcanzan la llamada tasa de «reemplazo» de 2.1 hijos por mujer.
«Considerando la aleatoriedad en las tasas de fertilidad y mortalidad, así como en las proporciones de sexo», explicó la coautora Diane Carmeliza N. Cuaresma, «una tasa de fertilidad superior al nivel estándar de reemplazo es necesaria para garantizar la sostenibilidad de nuestra población».
El estudio subraya que las poblaciones más pequeñas son particularmente vulnerables a estos cambios demográficos aleatorios, que pueden acabar, con el tiempo, con linajes familiares completos. Un leve aumento en el número de nacimientos femeninos parece atenuar este riesgo, lo que podría explicar por qué se observa un mayor número de niñas nacidas durante épocas de guerra, hambruna o inestabilidad —un fenómeno ampliamente documentado por científicos evolutivos.
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Aunque los investigadores no prevén un colapso inminente en los países desarrollados con grandes poblaciones, advierten que la mayoría de las líneas familiares individuales —junto con su patrimonio cultural y lingüístico— probablemente desaparecerán con el tiempo si las tasas de fertilidad no aumentan.
Fuente: LifeNews/InfoCatólica