Decálogo de La Comunicación
LaFamilia.info
02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- El ser humano es un ser relacional, una persona que necesita a los demás para realizarse. Él solo no llega a la plenitud. Por eso la comunicabilidad es esencial en él.
- La comunicación es de doble vía. Implica el arte de escuchar y el arte de hablar. Así aparece el diálogo.
- No de por supuesto que le han entendido. Asegúrese. Tampoco intente adivinar el pensamiento de la otra persona. Pregunte.
- No hay peor sordo que quien no quiere oír ”Cuando existe interés por la otra persona se capta el verdadero mensaje.
- Se necesita ser asertivo en el hablar. Decir lo que se piensa, sin miedo a herir al otro y sin cobardías. Con entereza pero sin ofender.
- La comunicación tiene como vehículo, además de las palabras, los gestos, la mirada, el tono de voz. El cuerpo habla.
- El mensaje debe ser claro y directo. Sin adornos innecesarios, ni pedantería. Sencillez y claridad son cualidades que todos añoramos en los demás y que los demás esperan de nosotros.
- Saber preguntar es un arte que conviene aprender. Después, escuchar para aprender.
- Cuando alguien le hable otórguele toda la atención. El cuerpo y la mente deben estar con esa persona. No haga dos cosas al tiempo.
- No exija que los demás le escuchen: Gánese la atención. No exija que los demás le comprendan: Hágase entender.
Decálogo de La Responsabilidad
LaFamilia.info
02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- La persona responsable responde por sus actos. Por eso piensa antes de actuar y mide sus consecuencias.
- Es responsable quien asume a cabalidad todos sus deberes y ejercita todos sus derechos.
- “Lo que hay que hacer se hace”, -afirma Josemaría Escrivá, en Camino, -“ Sin vacilar, sin miramientos” Responsabilidad es cumplir con el deber.
- Excusarse, justificarse, buscar pretextos o eludir compromisos, son faltas de responsabilidad.
- Ser responsable implica tener iniciativa. No es simplemente hacer lo que debo, sino emplear todas la inteligencia para hacerlo de la mejor manera.
- Valorar las cosas importantes, ser concientes de las repercusiones de los actos y huir de la frivolidad, son manifestaciones de responsabilidad.
- Las consecuencias de los actos hay que asumirlas siempre, aunque la acción sea involuntaria.
- Cuando voluntaria o involuntariamente hemos causado un mal a alguien, se debe resarcir el daño. Sobre todo si el daño es contra la fama o el honor de alguien.
- Otros valores relacionados con la responsabilidad: la prudencia al decidir y la justicia para dar a cada uno lo que le corresponde.
- ¿A quien hay que responder de nuestros actos? A nosotros mismos, a la familia, a la empresa, a la sociedad y a Dios.
Decálogo de La Serenidad
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02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- Serenidad es calma interior, sosiego, estabilidad de ánimo, dominio de uno mismo. La serenidad proporciona una fuerte energía vital.
- La serenidad no es apatía, impasibilidad o dejadez.
- La persona serena huye del activismo, es decir del afán de hacer mucho, pero sin dirección y sentido. Tampoco se deja llevar por la precipitación y los impulsos. Actúa después de pensar.
- La serenidad va de la mano de la ponderación y de la objetividad. No hace tragedia de pequeños sucesos negativos. No dramatiza. Mira los sucesos con realismo, con ánimo positivo.
- La persona serena conserva la calma sin desesperarse ni desanimarse. Enfrenta los problemas uno a uno, estudiando a fondo cada asunto y tomando alguna decisión. Después actúa con prontitud; de esa forma van desapareciendo los problemas.
- Conviene dominar los sentimientos, lo cual supone encauzarlos y expresarlos debidamente. Cuando no es así, perdemos el control de las decisiones y de las acciones.
- La ira y el rencor desestabilizan el corazón y producen amargura. Si no se corta a tiempo aparecerá el odio, pasión que daña al ser humano.
- “Dame Señor la dicha y yo me encargaré de ser ecuánime”, decía Tagore. Alegría interior, serenidad y ecuanimidad suelen ir unidas.
- Serenidad para reprender. Serenidad al tomar decisiones complejas. Serenidad ante la injusticia. Serenidad, especialmente, en momentos difíciles.
- En últimas, la serenidad proviene de confiar en Dios, que nunca abandona a quien confía en el.
Decálogo de La Solidaridad
LaFamilia.info
02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- Solidaridad es sentirse una sola cosa con los demás: “Todos para uno y uno para todos”.
- Sentir la solidaridad llena el corazón de seguridad, estímulo y paz.
- El interés por la gente debe ser genuino, sus intereses ocultos que puedan enturbiar la ayuda prestada.
- La solidaridad implica comprensión, disponibilidad, colaboración. Lleva consigo involucrarse y compartir
- Las manifestaciones verbales de solidaridad son importantes, pues todos necesitamos sentir el apoyo moral. Además se necesitan acciones concretas de ayuda.
- Ningún ser humano puede sernos indiferente. Siempre existirá alguna forma de manifestar nuestra solidaridad.
- A veces es más fácil prestar nuestra ayuda a gente lejana a nosotros, que a esas otras con las que se convive a diario.
- El egoísmo es pagado por los demás con frialdad, lejanía y aislamiento. Se recoge lo que se siembra.
- Es bueno pedir ayuda cuando la necesitamos. No conviene suponer que se darán cuenta. Ni dejarse llevar por el orgullo del que piensa que solo saldrá adelante.
- Cuando en un grupo humano se sustituye competir por cooperar, se produce la unión y el logro de los objetivos.
Decálogo de La Tolerancia
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02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- Ser tolerante es ser paciente, comprensivo, respetuoso y transigente con todos y cada uno de los seres humanos.
- Conviene distinguir entre persona y conducta. A la persona se le valora y se le comprende. De las ideas se puede y se debe discrepar.
- La persona tolerante posee un nivel elevado de comunicación efectiva: No se escuda en la tolerancia para no manifestar o defender los principios, tampoco avasalla o impone a nadie sus ideas.
- La Tolerancia no es un simple acuerdo de no agresión, sino que promueve el entendimiento de las personas e instituciones. Lleva a la unidad.
- El conformismo o la indiferencia ante el mal uso de las normas y valores no es tolerancia, pues este valor bien entendido debe incluir la ayuda mutua para buscar y encontrar lo mejor para las personas.
- La tolerancia valora y respeta las diferencias como factores que producen hermandad y sinergizan las relaciones.
- Nadie posee toda la verdad, puesto que la Verdad es inalcanzable para el ser humano.
- Tolerar no debe llevar al relativismo y subjetivismo. No puede constituirse en baluarte de la apatía intelectual ni quitarle fuerza a la búsqueda de la verdad.
- Las minorías y los débiles necesitan del apoyo de todos. La verdadera democracia hace valer el voto de la mayoría, pero sin descuidar o atacar a los grupos o personas más necesitadas.
- La tolerancia no está reñida con el ejercicio de la autoridad. La ley hay que cumplirla y hacerla cumplir.
Decálogo de La Honestidad
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02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- La persona íntegra vive lo que predica y habla lo que piensa.
- La sinceridad consiste en decir toda la verdad, a quien corresponde, de modo oportuno y en el lugar correspondiente. Decir la verdad no implica irrespetar a nadie.
- La persona íntegra, además, es auténtica. Hay coherencia entre lo que hace y lo que debe hacer, de acuerdo a sus principios. Vive auténticamente como un ser humano.
- La persona que miente (por engaño, exageración, precipitación al hablar, etc.) se hace un daño a sí misma. La mentira es auto-destructora; siempre se paga.
- Mentir para dañar a alguien; robar al pobre; hacer fracasar a alguien voluntariamente, son injusticias “gordas”.
- Ser justo es dar a cada uno lo suyo, lo que le corresponde: salario, derechos, reconocimiento, gratitud.
- La falta de integridad se quiere justificar diciendo que todos actúan así; o que es la única forma de salir adelante. Es necesario vivir según los principios, aunque esto suponga ir “contra corriente”.
- Ser honesto es ser transparente; Es necesario desprenderse de las máscaras que el ser humano se pone para defenderse, para ocultar sus inseguridades o miedos. El recelo, la agresividad, las apariencias son algunas de estas máscaras.
- Una falta de sinceridad, de veracidad, es aparentar una imagen que no corresponde con la realidad. Por ejemplo, aparentar virtudes que no se tienen.
- Preocuparse excesivamente por “el qué dirán”, aparte de mostrar inseguridad en uno mismo, es una falta de sencillez. También lo es justificarse o excusarse.
Decálogo del Esfuerzo
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02.06.2010
Del Libro “Trabajar Bien, Vivir Mejor”
Autor Regino Navarro Ribera.
Ediciones San Pablo. Bogotá, 2005.
- Todo lo que vale, exige esfuerzo, disciplina, dedicación. Decídase a emprender ese camino, cada día.
- La paciencia todo lo alcanza. Cambie la impaciencia por la perseverancia en el empeño. El tiempo es necesario para alcanzar cualquier objetivo.
- Ejercitar la paciencia es una manera de fortalecer la voluntad: paciencia para escuchar a los inoportunos, para controlar los impulsos, para no contestar mal, etc.
- Establezca un horario para su vida y ajústese a él, con flexibilidad, pero con exigencia. No lo cambie por cualquier excusa.
- Lo que hay que hacer, se hace: ¡ahora! Sin aplazarlo. Si algo le supone esfuerzo, esa es una buena razón para hacerlo. Ahí radica la clave de la superación personal.
- Hable claro, aunque pase un mal rato. Pero hágalo como le gustaría que lo hicieran con usted.
- ¡Atrévase! Corra riesgos, sin dejar de ser prudente. No se asuste por el miedo a fracasar o por las dificultades que encontrará. Sea audaz.
- Ejercite la voluntad cuidando los detalles pequeños: organizar el escritorio, recoger un papel del piso, sonreír a alguien, contestar bien el teléfono, cumplir un plazo, etc.
- Otras maneras de fortalecer la voluntad es perseverar en lo que comienza: una dieta, un plan de ejercicios, el aprendizaje de un idioma, la lectura de un libro… Comenzar lo hace cualquiera; sólo los triunfadores van hasta el final.
- El autodominio es importante para ser libre, pues de lo contrario se es prisionero de uno mismo. No acepte ser esclavo de sus vicios o de sus sentimientos negativos: sublévese, sepárelos de su vida.