El vocabulario de los adolescentes… ¡o lo que queda de ello!

 

Por Juan Camilo Díaz / Blogs LaFamilia.info 

 

Foto: Freepik 

 

En una reciente charla que dicté para un grupo de padres de familia de FAMOF (Familias que ayudan a otras familias), un papá me manifestaba su enorme preocupación por el vocabulario que están manejando los adolescentes, tanto hombres como mujeres, quienes, sin importar quien está al lado, ya sean adultos, niños, profesores, personas de la tercera edad, cualquiera, se comunican con sus amigos y relacionados de una manera bastante particular: tres de cada cinco palabras son groserías.

 

No vamos a decir que jamás se nos ha salido una mala palabra. El que esté libre de culpa que lance la primera grosería. Sin embargo, es notable que cuando todo el vocabulario está basado en palabras de dudosa procedencia pues tenemos un indicador que debemos mirar con cuidado.

 

Según un estudio adelantado por profesores de la Universidad de La Sabana, los jóvenes son vulgares y violentos al hablar. El estudio, titulado “El habla de los jóvenes en la universidad bogotana”, afirma que es común la utilización de palabras de doble sentido y que los “estudiantes se comunican con palabras soeces que a veces solo son entendidas por ciertos grupos poblacionales”.

 

Voy a ser directo, así que si usted se aterra fácilmente con ciertas palabras, mejor no siga leyendo. La investigación, liderada por el profesor Mariano Lozano, asegura que lo para nosotros en otra época era un serio madrazo como ‘marica’, ‘güevon’ y ‘guisa’, hoy día son muy usadas y normales. Así se saludan, así se tratan y no se sienten agredidos ni ofendidos.

 

Incluso los términos se han modificado. Ahora los jóvenes utilizan `arrocito en bajo´, `hacer la vuelta´ o `goce´ de manera natural cuando se refieren de un amor escondido, de tener sexo o de un amor fugaz y medio prohíbido. El problema es que nosotros no entendemos cuando ellos hablan y quedamos despistados.

Si bien las situaciones relacionadas con el lenguaje son generacionales y muchas de ellas circunstanciales, para el profesor Lozano no dejan de ser preocupantes porque su uso se vuelve masivo, llegan a los diccionarios y otras generaciones las comienzan a usar en detrimento de un manejo del lenguaje y vocabulario adecuado.

 

Y no solamente estamos ante un problema de expresión oral. Las redes sociales, los sistemas de mensajería instantánea (como WhatsApp) y la necesidad de comunicarse de manera rápida, se han creado una especie de lenguaje paralelo en donde se recortan las palabras. ¿Conocen ustedes sus significados? Les copio un sitio web para que aprendamos: (http://clicseguro.sep.gob.mx/archivos/Nueva_escritura.pdf).

 

Estudios indican que si continúa la creciente tendencia de comunicación “minimalista”, en menos de 30 años las nuevas generaciones tendrán un 60% más problemas de aprendizaje de la lecto-escritura.

 

Los padres de familia y maestros tenemos la responsabilidad de orientar, corregir y enseñar a nuestros hijos las mejores formas de comunicación. Y todo parte con el ejemplo que damos. Evitar las groserías, utilizar mejor el vocabulario, leer y motivar la lectura pueden ser útiles para lograr que los jóvenes se comuniquen mejor.

 

Espero, a lo bien, que esta nota les sirva de algo parceros…


Por Juan Camilo Díaz para LaFamilia.info

 

***

 

Esposo y padre de familia. Comunicador Social y Periodista. Magister en Educación con Énfasis en Desarrollo Humano y Valores. Diplomado en Familia. Profesor investigador del Instituto de la Familia de la Universidad de La Sabana. Investigador, consultor y gestor de proyectos en Comunicación, Familia e infancia. 
jcdiazbohorquez@gmail.com – Twitter: @jcdiazbohorquez

 

Ver más artículos de este autor

 

Blog: www.jcdiazbohorquez.wordpress.com

 

 

Lafamilia.info –
febrero 13, 2017
Por Juan Camilo Díaz / Blogs LaFamilia.info – 13.02.2017 ¿Tiene pensado realizar sexting? Antes de hacerlo es mejor que tenga en cuenta estas razones para no hacerlo.
Lafamilia.info –
septiembre 5, 2016
Por Juan Camilo Díaz / Blogs LaFamilia.info - 12.09.2016 Los padres de familia vienen encontrando muchas dificultades para educar a los hijos: presiones sociales, distorsión de valores, ausencia de autoridad, dispersión...

Te puede interesar: